ADORADORES DE LA CULTURA Y DE LA MAGIA
Publicado en Los orígenes celtas del reino de Brigantia (Ed. Abada, 2007)
R. Sainero.
Emeritus Professor. Academic, for invitation, of the Institute for Education and Research.
Sobre el
mundo mágico o sobrenatural conectado a los seres humanos y la naturaleza los
celtas sí nos han legado cierta información. Los poderes mágicos, aparecen
continuamente en los relatos y seres con
poderes sobrenaturales serán unas veces tratados más bien como dioses y
otras como seres humanos con poderes mágicos, a la hora de considerar los
dioses celtas, sobre todo en el apartado irlandés, deberemos de tener presente
esta doble posibilidad. Los celtas creían en los poderes mágicos ocultos en la
naturaleza y los temían en gran manera, bástenos comprobar todos los relatos
concernientes a este tema que aparecen en sus escritos, eran grandes
supersticiosos y respetaban una serie de tabúes que incluso los reyes debían de
cumplir, por temor a que grandes males cayeran sobre ellos. En irlanda la
"geis" o "gesha" (pl. "geisi"), era un poder
mágico que el ser humano mediante una serie de rituales debía de controlar
durante toda su vida. Hoy en día quedan algunos de estos ejemplos de geisi por
todos nosotros conocidos como por ejemplo la buena o mala suerte de que un gato
blanco o negro se cruce en el camino de alguien, pasar por debajo de una
escalera, empezar algo importante con el pie derecho, etc. Por diferentes
textos históricos sabemos que los celtas creían en la inmortalidad del alma y
en la existencia del mundo del más allá, y que sus druidas entre otros actos
practicaban los sacrificios. Cesar en la Guerra
de las Galias nos habla de la creencia de los galos en la inmortalidad del
alma y de que al morir cambian de cuerpo y siguen viviendo una nueva vida, por
lo que no le tienen miedo a la muerte y tambien del enorme poder de los druidas
que podian aislar del resto del clan a todo aquel que discutiera sus designios[1].
Es interesante destacar en este apartado las creencias religiosas conectadas
con el mundo de la naturaleza. Existen seres mágicos relacionados con la
fertilidad de la tierra. Las cosechas necesarias para que los animales y los
seres humanos puedan sobrevivir estan protegidas por ciertos dioses. Y las aguas
de los ríos, las rocas y los árboles tuvieron un poder mágico entre los celtas.
En gaélico irlandés tenemos la palabra sidhe "mágico, sobrenatural".
Síd tiene en irlanda el significado de montaña o colina mágica o
encantada. En algunas de estas colinas se han encontrado gran cantidad de
tumbas prehistóricas construidas con piedras (tipo de corredor con cámara
funeraria), algunas de ellas pueden pertenecer al año 3000 ó 2500 a. de Cristo.
Los primitivos pobladores de la isla posiblemente consideraban que los
espíritus de los dioses anidaban en ellas. Como he podido comprobar en algunas
de ellas, en la zona de Sligo, el día más corto del año permitía que los rayos
del sol entrará por el corredor de la tumba y llegaran hasta el centro de la
cámara funeraria del sid. Beltaine (Beltene) y Samhain eran en Irlanda los dos
festivales por excelencia del mundo celta conectado con las creencias solares.
Beltaine era el festival que tenía lugar el 1 de mayo. Así como la fiesta del
Samhain estaba dedicado a la madre tierra y a las cosechas y del culto a los
muertos, se celebraba la noche anterior al 1 de noviembre, era la noche en la
que los espíritus saldrían de estas tumbas megalíticas para vengarse de los
humanos. Beltaine era el festival que indicaba el comienzo de la estación
fèrtil y calurosa, era el momento en el que la hierba crecía y podía alimentar
al ganado, por lo que estaba directamente relacionado con los animales. Durante
el ferstival se encendían grandes hogueras y hacía pasar a los animales entre ellas
para evitar que contrayeran enfermedades. Es en estos manuscritos primitivos
donde difusamente ha quedado el legado histórico que nos muestra estas
creencias (ver mi Diccionario de Mitología Celta, ed. Akal (Madrid).